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| Los Miserables |
Tiene 30 años y ha pasado 11 en una cárcel norteamericana acusada de complicidad en un delito que no cometió. Lucía tiene la belleza serena y melancólica de los que han sufrido mucho. Aunque se viste sencillamente de acuerdo a sus posibilidades, todo le queda tan bien, que luce su natural y sensual elegancia a cara limpia y sin falsos pudores. Nada le ha sido fácil a Lucha, quien, desde niña, tuvo que lidiar con el carácter despótico de su madre Fernanda. Su adolescencia fue tormentosa y rebelde, sobretodo porque se enamoró de un guapo indeseable del barrio. Ha tenido 11 años de reflexión en prisión, que han cambiado a la otrora rebelde jovencita. Hoy Lucía es una mujer introvertida. Tiene una “autoritas” natural, y se hace respetar de todos, aunque habla poco y se impone menos. Su reservado carácter levanta una gran curiosidad a su paso. Ama apasionadamente, pero se guarda de demostrarlo hasta que su pasión estalla rompiendo los diques de su natural contención. Es tierna, cálida y amable con los que sufren, y combativa y fiera con los que abusan. Como ha vivido tantas desgracias no tiene miedo a la muerte, ni a perderlo todo, porque nada tiene. Es una mujer con “alma de acero”. Desgraciadamente, le tocará jugar un peligroso ajedrez de verdades y mentiras, con el hombre que la devolverá al amor. Su perseguidor y némesis, el “déspota” Daniel Ponce, a quien amará como nunca antes lo había hecho, pero aunque él será implacable y duro con ella, Lucha es incapaz de guardarle rencor a él y al resto de sus enemigos, porque su verdadera guerra sin cuartel es contra Dios, al que en definitiva cree su único gran adversario.
Daniel Ponce – Erik Hayser
Daniel es jefe de detectives del departamento de narcóticos y odia a los traficantes, a los drogadictos y a todos los implicados con ese mundo. Guapo y duro, no tiene que hacer mucho para ganarse el favor de alguna mujer, porque todas caen rendidas ante el policía y su extraña mezcla de pasión y frialdad. Es muy bueno en su profesión, el mejor quizás, pero sus métodos no son nada apegados al libro de procedimientos, aunque es brillante, lógico e intuitivo prefiere moverse y vestirse como un renegado. Prefiere su moto, se olvida de usar trajes y de afeitarse todos los días, y se mueve como pez en el agua en los barrios bajos de la ciudad, entre prostitutas y ladrones. Pero jamás olvida la trágica manera como perdió a su madre. Quizá por eso le cuesta tanto crear lazos estables con las mujeres y se niega a tener familia. Tiene miedo de depender del amor, para luego perderlo como perdió a su madre. Sus únicos e intensos afectos en el presente son su tía Amparo, y su medio hermano César Mondragón.
Liliana Durán – Aylín Mujica
Liliana es una de las hembras de los Durán, es tan bella como sus hermanas Helena o “Lucha”, aunque todos dicen que es muy parecida físicamente a “Lucha”, parecido que ella detesta. Tiene el carácter y ambición de su madre. Está determinada a triunfar en la vida y no le importa lo que se tenga que llevar por delante. Desde muy joven ha envidiado a todas sus hermanas. En especial a “Lucha”, que era tan exitosa con los chicos en la adolescencia. Es una profesional destacada, y la jefe de Relaciones Públicas de las empresas Echeverría. Su ambición la convertirá en una mujer siniestra y muy peligrosa que será capaz hasta de matar por lograr sus objetivos.
César Mondragón- Aarón Díaz
Joven de éxitos y buena suerte. Es en esencia un hombre de bien. Criado en la abundancia y el bienestar, le es fácil ser bondadoso, carismático, simpático, atractivo, desprejuiciado y buen abogado. Con todas esas cualidades era lógico pensar que deviniera hacia la política, en la que también, ha logrado fáciles éxitos, porque al primer intento gano un escaño a una diputación. César es en suma un ganador, lo tiene todo, menos una familia porque a los 21 años se enloqueció por una bella debutante social, la inmensamente rica Déborah Echeverría, y decidió casarse con ella. Luego de varios años ya no soporta a la insufrible y caprichosa socialité. Tienen un hijo, Octavio, de buenos sentimientos como el padre, con el que César tiene una excelente comunicación. Su medio hermano Daniel es su mejor amigo y confidente, se sabe admirado y querido por él, y sus lazos son indestructibles, pero desconocen ambos que se están enamorando al mismo tiempo de la misma mujer.
Olegario Marrero “El Diablo”- Gabriel Porras
Olegario es un hombre poderoso en el mundo del tráfico de drogas, es el jefe del cartel más importante del país. Varonil, con cierto atractivo, seguro de sí mismo, encantador, hábil con las palabras, aunque en la primera impresión puede parecer un tipo agradable y bonachón, detrás de esa imagen está un terrible ser humano, capaz de los crímenes más espeluznantes, de ahí el apodo de “El Diablo”. El principal enemigo de Olegario será Daniel, porque además del antagonismo natural que hay entre ellos, “El Diablo” no tolerará que todas las mujeres estén obsesionadas con él.
Roxana Pérez- Macarena Oz
Preciosa niña de 10 a 11 años de edad y que será la hija espiritual de “Lucha”. Con el paso de la historia se convertirá en su aliada y cómplice, que a veces aportará soluciones inesperadas que hablarán de su capacidad de sobrevivencia en un mundo hostil. Roxanita también se enamorará de Daniel Ponce como posible papá, por lo que será, junto con Amparo la gran alcahueta de estos amantes. Su carácter y espontaneidad aportarán ternura y alegría en medio del drama.
Sor Amparo Ponce- Verónica Terán
Amparo es la santidad en acción, es un ser vital, ígneo, tangible y no se anda por las nubes a la hora de decir sus verdades, no es política ni frágil y lleva con dios una relación de “sociedad molesta” porque pelea constantemente con él, porque no la ayuda como debería a expandir su mandamiento de amor. A lo largo de los años ha levantado con su propio esfuerzo un hospital de caridad para los más pobres, el cual se mantiene gracias a su persecución implacable a los industriales y ricos de la capital. Su hospital recoge toda la escoria social de la ciudad con amor y misericordia y tiene en planes abrir otro parecido. Su sobrino Daniel es su adoración, aunque vive regañándolo por su falta de modales. Ella será el remanso en el que “Lucha” buscará consuelo y compañía cuando la vida la vuelva a golpear.
Gastón Gordillo- Rodrigo Vidal
Gastón es de temperamento anal, controlador, agarrado y frígido. La única vez que dio salida libre a sus hormonas dejó embarazada a Consuelo y ahora internamente la culpa de todas sus desgracias. Fue el hijo único de una viuda que lo crío en la creencia de que estaban a punto de morirse de hambre, aunque su difunto padre les había dejado lo suficiente para vivir decentemente y para pagar sus estudios universitarios. Tiene una doble vida, y tras su apariencia de hombre intachable y de misa y comunión dominical, visita a menudo a prostitutas con las que desahoga sus desordenados apetitos sexuales.
Pablo Riobueno- Diego Soldano
Guapo, viril e inteligente policía encubierto que se hace pasar como un jardinero en la mansión Echeverría. Tratando de lograr sus objetivos profesionales se topará con su novia de adolescencia, ahora convertida en una gran dama, con un hijo, y casada con el sospechoso que Pablo investiga. Lo peor que puede pasarle a un policía es tener un elemento de distracción tan perturbador como el amor en plena investigación. Pablo verá peligrar su importante misión por dos mujeres. La que él ama y la que se enamora como una loca de él.
Carlos Gallardo- Aldo Gallardo
Carlos es un brillante psiquiatra y es guapo y lo sería mas, si no tuviera esa pinta de intelectual distraído y desprolijo. Este despistado pan de Dios es excelente en su trabajo, y tiene cuando se lo propone un ojo clínico para desentrañar los misterios de la psiquis humana, en especial, cuando esta trastocada. Eso si, siempre que no esté en juego su corazón, será capaz de excelentes deducciones policíacas. Carlos es el mejor amigo de Daniel, y lo será de “Lucha”, y parte del entramado policial de la historia.
Radamés Echeverría- Javier Díaz Dueñas
Hombre maduro, bien conservado, atractivo, distinguido y aparentemente de buenos modales, pero en realidad es un maltratador de mujeres, sutilmente sádico y manipulador, que se esconde detrás de su porte de caballero intachable. Siempre ha sido poderoso y rico, pero ahora lo es en grado superlativo, porque está ligado a un gran cartel de drogas. Es suegro de César Mondragón, padre de Déborah Echeverría de Mondragón e Ignacio Echeverría Durán, marido de Helena Durán, la hermana mayor de “Lucha”. Hoy por hoy le crispa la pasividad y falta de pasión de su esposa Helena y por eso buscará complacer sus instintos sexuales con quien menos debería. Su única debilidad afectiva es su único hijo varón, Nachito.
Déborah Echeverría- Estela Calderón
Mujer de aproximadamente 37 años, bella, artificial, plástica. Vana, infiel, manipuladora y necia. Personaje negativo y molesto, incapaz de amar siquiera a su propio y olvidado hijo Octavio. Se dedica a hacerles la vida imposible a todos a su alrededor, en especial a su madrastra Helena y a la familia.
Genaro Cabello- Luis uribe
Policía corrupto que ha visto como sus compañeros de menor edad se han destacado y han escalado posiciones mejores. Este es el caso de Daniel, que de ser subordinado pasó a ser su igual, y luego su jefe. Le está llegando su hora de la jubilación y no tiene ni un pasado glorioso que contar, ni un buen futuro. Por eso se ha vendido al cartel, y pasa información de primera mano. Se ira complicando cada vez mas y se convertirá en un agente peligroso como una rata cuando la acechan.
Nuria Pérez- Elsy Reyes
Hermana de Rosalía Pérez, la madre biológica de Roxana. Una mujer atractiva pero vulgar, un ser horrendo de alma. Producto exclusivo de la miseria de los pueblos. Prostituta y casi mendiga. Mujer que desgastó su juventud en malos pasos. A los 35 está alcoholizada y degradada. Vive en un departamento miserable que le dejara su madre recién enterrada. Detesta a su sobrina, la maltrata y la manda a mendigar, y ha planeado junto a Roque Sarmiento, su amante y proxeneta, vender a Roxanita a un tratante de blancas.
Ignacio Durán- Marco Treviño
Ignacio es un buen hombre. Pese a su ropa humilde y de trabajo sigue siendo distinguido y afable. Agobiado bajo el peso de sus derrotas, y la pérfida y tenaz lengua de su mujer. Y es que hace muchos años la familia Durán tuvo bienes de fortuna y lo perdió todo.
Fernanda Monteagudo de Durán- María Barbosa
Guapa e imponente mujer de aproximadamente 50 años. Todos pueden ver aún en sus rasgos parte de la belleza legendaria de su juventud. Fernanda también es una arribista. Sabiéndose bella e inteligente, fue inmensamente feliz cuando conquistó a quien ella creía un heredero y se convirtió en la señora de Ignacio Durán. Se amargó terriblemente cuando se enteró que la familia lo había perdido todo y tuvo que volver a servir mesas y a cocinar en la ruinosa fonda de sus padres.
Helena Durán de Echeverría- Alexandra de la Mora
Helena es la mayor, y si se quiere la mas bella y elegante de las hijas de Ignacio y Fernanda. Su madre la educó con aires de reina, y como esposa del millonario Echeverría ha entrado todos los años en la lista de las mejores vestidas de la ciudad. Es generosa con su familia y vela siempre por su bienestar, hasta donde se lo permite su autoritario y despótico marido. Lo cierto es que bajo esa capa de indiferencia Helena oculta muchos dolores y humillaciones de parte de su marido y su hijastra. Es estoica, y no se queja.
Consuelo Durán de Gordillo- Anastasia
La segunda de las hijas de Ignacio y Fernanda. Consuelo nunca fue tan agraciada como sus hermanas, pero lo que no tiene de belleza, lo suple con cariño, simpatía pasión por la vida y carisma. Generosa y expansiva, siempre abre al mundo su corazón y su bocota. Porque no puede evitar hablar, decir lo que piensa, o lo que sabe.
Vicky es una alumna brillante y aventajada, un ratón de biblioteca que parece saber de todo un poco, y que está solicitando becas al fin del mundo, para irse de su casa y lejos de la familia que dice detestar. Ella es físicamente todo lo que su abuela Fernanda detesta de las mujeres. Detesta la pasividad de su madre, aunque la ama infinitamente.
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